El primer fin de semana de junio pudimos disfrutar de la experiencia de ver los piornos en la provincia de Ávila participando en algunas de las actividades del Festival del piorno en flor en la Sierra de Gredos, gracias a la organización de Daniel López y a la participación de la Asociación de Empresarios de Turismo del Norte de Gredos (ASENORG). Además, no estuvimos solos, puesto que nos acompañaron los compañeros de los blogs de viajes Ávila con niños, Senderuelos, Ciudad dormida, Viajamos juntos y Mapa y mochila. ¡Un fin de semana inolvidable!
Comenzamos el viernes por la tarde con una reparadora sesión de spa en Spa Aguas de Gredos: piscina de chorros, jacuzzi, sauna, pediluvio… ¡qué gran relajación!
Festival del piorno en flor en la Sierra de Gredos
Después continuamos con una degustación de productos típicos en el bar Gredos de Hoyos del Espino, como patatas revolconas con sus torreznos, croquetas de boletus, picadillo de morcilla y, cómo no, un buen chuletón; para postre, una tarta de queso con membrillo Santa Teresa y un flan de higo de elaboración casera… ¡¡¡mmnnnn!!!
A continuación, tras una breve explicación astronómica a cargo de Miriam Gil, monitor Starlight, pudimos observar algunas estrellas del cielo de Gredos, ya que la noche estaba algo nublada. Hay que mencionar que Gredos posee, desde 2013, el certificado Starlight otorgado por la Fundación Starlight y avalado por la UNESCO; esto significa que goza de un cielo con características óptimas para para la observación astronómica y la astrofotografía.
Nos alojamos en la casa rural Guía de Gredos, equipada con todo lo necesario para una estancia perfecta.

[booking_product_helper shortname=»busca hoteles»]

El sábado comenzó con un gran desayuno en el bar Gredos. Y a continuación salimos a conocer algunos de los pueblos que participaban en el concurso de decoración de exteriores. En  Navacepeda de Tormes y San Bartolomé de Tormes vimos 2 de las 3 carabelas que utilizó Colón en su viaje del descubrimiento de América: la Pinta y la Niña, respectivamente. Además, en San Bartolomé encontramos al mismísimo Cristóbal Colón.
Este motivo fue elegido porque de los pueblos de Gredos se extrajo la madera de pinos con la que se construyeron los mástiles de las carabelas. Además, en San Bartolomé había una simpática rayuela hecha de piornos.
En el Barco de Ávila vimos los torreones de la muralla adornados para la ocasión, y en el castillo de Valdecorneja degustamos una muestra de gastronomía típica con productos locales: guiso de judías, patatas revolconas, chuletón, natillas con sirope de boletus, miel, chocolates y perrunillas. ¡Todo delicioso!
Por la tarde continuamos nuestra visita por los pueblos de la zona para seguir viendo la decoración. En Angostura de Tormes (o La Angostura) encontramos un original árbol con palabras positivas y unos calderos para hervir palabras negativas. En La Herguijuela, una de las localidades más altas de la provincia, estaba la tercera carabela, la Santa María.
Festival del piorno en flor en la Sierra de Gredos
En San Martín de la Vega del Alberche encontramos, a los pies de la iglesia parroquial de San Martín Obispo, una bonita decoración en homenaje a las mujeres que construyeron la historia del pueblo; estaban representadas varias escenas de la vida cotidiana del pueblo antiguamente, ¡no faltaba detalle! También en el arroyo de la Fragua, al lado de la iglesia. También tuvimos tiempo de observar el piorno en el campo, en todo su esplendor.
Festival del piorno en flor en la Sierra de Gredos
A media tarde, participamos en una observación de aves en el hostal Almanzor, que tiene un espacio reservado (hide) para tal fin. Con el reclamo de comida situada en el exterior, pudimos ver picapinos, mirlos, arrendajos, trepadores azules, un cuervo, una tórtola… ¡hasta una ardilla!
Después, en el mismo hostal, degustamos unas riquísimas tapas: jamón, sardina ahumada, queso Monte Enebro, secreto, croquetas de nueces y yogur con mango.
El domingo visitamos la panadería Horno Viejo, donde vimos el enorme surtido de bollería que elaboran e incluso entramos a la zona de hornos.
A continuación visitamos Navarredonda de Gredos, donde el amable párroco nos abrió la puerta de la iglesia de la Asunción, del siglo XVI y de estilo gótico tardío. Nos llamó la atención su torre-campanario exenta, es decir, separada del cuerpo de la iglesia.
Al lado hay restos de calzada y puente de un solo ojo, ambos de la época románica y utilizados para la trashumancia.
Para completar la mañana, realizamos una ruta de senderismo por el pinar de Hoyocasero, declarada Zona Especial de Conservación, pero que merecería gozar de una mayor protección por ser un ecosistema único con algunas especies endémicas de flora, como la alcachofa de campo o el senecio de Coincy; nos contaron que muchas especies de flores están desapareciendo porque las personas cada año entran y las cortan para llevárselas como decoración, lo que es una pena.
También hay tiene roble y pino silvestre y muchas más especies de flora: gamones, peonías, jacintos de bosque, pulsatilas, toronjiles… así como muchas setas por las intensas lluvias de la primavera.
Continuamos la marcha hasta una preciosa fuente e iniciamos el camino de vuelta.
Antes de comer tuvimos tiempo para una rápida visita a Hoyocasero, tras la cual nos dirigimos al restaurante Venta del Obispo, un lugar con una antigüedad de más de 100 años, en el que desguatamos un almuerzo que incluyó carne de la ganadería de la casa.
Después tuvimos el privilegio de disfrutar de una interesantísima visita guiada por el Parador de Gredos de mano de su directora, Eva Legaza. Este fue el primer establecimiento de la red de paradores, siendo inaugurado en 1928, y ha sido escenario de importantes acontecimientos como la insurrección militar que desembocó en la Guerra Civil o la redacción de la Constitución Española de 1978.
Son muy bonitos los salones, decorados con motivos rústicos y de caza, pues el rey Alfonso XIII, que solía visitarlo con frecuencia, era gran aficionado a esta actividad.
Finalizamos nuestro recorrido para asistir al acto de entrega de Premios del Concurso de Decoración con Piornos 2018.
Y así concluye este estupendo fin de semana en el que combinamos cultura, gastronomía, y naturaleza.
Agradecemos de nuevo a todos los organizadores y participantes, sin los cuales no habríamos podido disfrutar de este fantástico fin de semana.

Si te gustan las floraciones te recomendamos leer los siguientes artículos:

Tiedra y sus campos de lavanda

Almendros en flor en Quinta de los Molinos

El cerezo en flor en el valle de Jerte

Campos de lavanda de Brihuega

¡¡Hasta el próximo post!!