La capital de México es la segunda ciudad más grande del continente americano con cerca de 25 millones de habitantes. Fue fundada por los mexicas (aztecas) en el año 1325 sobre un islote situado en el lago de Texcoco que ocupaba la zona en aquella época. Con el nombre de Tenochtitlan, que significa “lugar de tunas sobre piedra” (tuna = higo chumbo), el asentamiento llegó a ser la capital del imperio azteca hasta la llegada de Hernán Cortés en 1621, que provocó la caída de dicho imperio pasando a formar parte de la Corona de Castilla y dando lugar al Virreinato de Nueva España.
México se independizó en 1821, lo cual puso fin al dominio español en la mayoría de los territorios de Nueva España. Actualmente, Ciudad de México conserva restos de su pasado azteca y colonial en un centro histórico que fue declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO en 1987. Además, fue nombrada “Capital Iberoamericana de la Cultura 2010″.
Conocer la ciudad en dos días es imposible, teniendo en cuenta que hay más de 100 museos. Si se dispone de poco tiempo, será imprescindible saber cuáles son los puntos más importantes para poder priorizar.
Qué ver en Ciudad de México
Centro Histórico
Lo mejor es comenzar por el centro histórico, siendo el lugar más emblemático la Plaza de la Constitución o más conocida como Zócalo; es la segunda plaza más grande del mundo después de la de Tian’anmen en Pekín. En ella y en las calles aledañas están muchos de los principales atractivos de la ciudad.
Catedral Metropolitana
Es la catedral más grande e importante de Latinoamérica. También fue la primera que se construyó en el continente americano, en el lugar donde estuvo el Templo Mayor de los mexicas. Un primer templo fue construido por orden de Hernán Cortés, con materiales obtenidos en gran parte de los edificios de la antigua Tenochtitlan. El actual fue construido entre 1573 y 1813, inspirada en las españolas de Jaén y Valladolid.
En el exterior destacan dos torres campanarios y su monumental fachada de estilo barroco. En el interior, 5 naves y 16 capillas. El acceso es libre y gratuito.
Anexo a la catedral está el Sagrario Metropolitano o Parroquia de la Asunción, cuya función inicial era custodiar archivos y vestimentas de arzobispos y después ser lugar para la Eucaristía. Tiene una espectacular fachada barroca.
Maquetas históricas, ruinas y museo del Templo Mayor
A un lado de la catedral hay varias maquetas de lo que fue el lago Texcoco y la ciudad de Tenochtitlan. Junto a ellas están los restos de lo que fue el Templo Mayor. Junto a las ruinas está el museo del Templo Mayor, con 8 salas que muestran piezas encontradas en el templo y un radio de 7 cuadras alrededor.
Otros edificios en la plaza del Zócalo
Otros edificios reseñables en la plaza son el Palacio Nacional (sede del Gobierno), el Antiguo Palacio del Ayuntamiento con soportales en los que hay azulejos con 6 escudos relacionados con la fundación de la ciudad, y el Edificio de Gobierno de la Ciudad de México.
También hay edificios comerciales antiguos, como el Viejo Portal de Mercaderes, y varios hoteles. Uno de ellos, el Gran Hotel Ciudad de México, tiene una vidriera Art Nouveau con más de 20000 piezas de vidrio de colores traída de Francia en 1906.
Otros edificios cercanos
En las proximidades del Zócalo se pueden encontrar multitud de edificios destacables por su arquitectura. Algunos de ellos son:
- Oratorio de San Felipe Neri: templo católico barroco del siglo XVIII conocido como La Profesa.
- Iglesia de San Francisco: con una preciosa portada barroca, fue la iglesia principal del convento de San Francisco, primera fundación religiosa de la Nueva España.
- Casa de los Azulejos: palacio del siglo XVIII con decoración de azulejos de Talavera. En su interior hay un bonito patio que alberga un restaurante.
- Palacio de Bellas Artes: construido en el siglo XX, alberga el Museo Nacional de Arquitectura (MUNARQ) y el Museo de Bellas Artes. Además, es sede de la Orquesta Sinfónica Nacional, la Compañía Nacional de Teatro, la Compañía Nacional de Ópera y la Compañía Nacional de Danza.
Calle Tacuba
Considerada la calle más antigua de América, fue construida por los mexicas en el siglo XIV. Mide más de 8 kilómetros, comenzando en la parte trasera de la Catedral Metropolitana y terminando en el Panteón Británico. Está dividida en 5 tramos, cada uno con su nombre, y en el primero de ellos concentra varios edificios notables por su arquitectura:
- Palacio Postal: también llamado Palacio de Correos o Quinta Casa de Correos, fue construido a principios del siglo XX; tiene un espectacular exterior plateresco y un interior de estructura metálica con una escalinata decorada con escudos heráldicos.
- Palacio de Minería: edificio neoclásico construido entre los siglos XVIII y XIX. Tiene un bonito patio y alberga una colección de meteoritos.
- Palacio de la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas, sede del Museo Nacional de Arte (MUNAL), con la estatua ecuestre de Carlos IV en su fachada.
Plaza Garibaldi
Esta plaza es famosa por concentrar numerosos grupos de mariachis con trajes típicos en las tardes de los fines de semana. Está rodeada varios locales famosos como el Museo del Tequila, la pulquería más antigua del país o el bar Tenampa, en el que actúan grandes estrellas. También hay una pequeña plantación de agave azul, la planta con la que se elabora el tequila. Aquí está además el paseo de las Luminarias o de la Fama, con las estatuas de las figuras más importantes de la música mexicana.
Museo Nacional de Antropología (MNA)
Fuera del centro histórico, junto al parque Tamayo, encontramos este espectacular museo inaugurado en 1964 que muestra una impresionante colección de piezas, más de 15000 distribuidas en 22 salas: 10 inferiores sobre las culturas prehispánicas y 12 superiores sobre las culturas indígenas que viven en el país. La pieza más importante es la Piedra del Sol, un calendario azteca que representa la concepción del tiempo según esta cultura, con meses de 20 días y siglos de 52 años.
Es un extensísimo museo al que hay que dedicar varias horas. Nosotros no pudimos ver todas las salas, pero nos llamaron la atención otras muchas piezas como por ejemplo un códice maya, una estatua de Chac Mool (mensajero entre hombres y dioses), atlantes mayas, la Piedra de Tízoc (altar para sacrificios) o una estela zapoteca.
El horario del museo es de martes a domingo de 9:00 a 18:00 y la entrada cuesta 390 pesos mexicanos (unos 20 euros), aunque nosotros acudimos un sábado por la tarde un poco antes de las 17:00 y nos dejaron pasar gratis.
Se puede llegar en metro, en las estaciones de Auditorio (línea 7) y Chapultepec (línea 1); nosotros fuimos en el autobús 7, desde la parada de El Ángel hasta la de Antropología. Al otro lado del Paseo de la Reforma está el gran Bosque de Chapultepec, con el castillo del mismo nombre que alberga el Museo Nacional de Historia.
Xochimilco
Al sur de la ciudad se encuentra este barrio, que es uno de los más pintorescos y frecuentados por turistas y locales. Está formado por un conjunto de canales como si de Venecia se tratase, reminiscencia de tiempos pasados en los que la zona era un gran lago de agua dulce. Su origen está en la época prehispánica, cuando en el siglo XIV los nahuatlacas construyeron porciones de tierra (chinampas) sobre raíces para la sembrar legumbres y flores, dejando entre ellas canales de agua para transportar mercancías en canoas. Llamaron al lugar Xochimilco, que significa “tierra sembrada de flores”.
Hoy en día se conservan muchos de los canales, habiéndose construido embarcaderos y pudiendo navegar en las trajineras, barcos que son como una especie de góndola y que se mueven con una pértiga que el lanchero apoya en el fondo para dar impulso. Todas las trajineras tienen una alegre decoración con motivos florales y mil colores.
Xochimilco, junto con el Centro Histórico de la Ciudad de México, fue declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO en 1987.
Para llegar, hay que ir en metro hasta la estación Tasqueña (última de la línea 2) y allí tomar el Tren Ligero L1, cuya última parada es Xochimilco.
Basílica de Santa María de Guadalupe
Situada al norte de la ciudad, en realidad es un conjunto de varios edificios: los históricos de los siglos XVII – XVIII, y el gran santuario circular del siglo XX. Actualmente, la Nueva Basílica es el segundo recinto mariano más visitado del mundo, por detrás de la Basílica de San Pedro del Vaticano. Son varios los puntos a visitar del conjunto:
- Nueva Basílica: se construyó entre los años 1974 y 1976, debido al aumento de fieles y al paulatino hundimiento de la Antigua Basílica. En una de las áreas del interior está la figura de la Virgen de Guadalupe; una práctica pasarela mecánica frente a ella evita aglomeraciones.
- Antigua Basílica: construida en estilos barroco y neoclásico en sustitución de un templo anterior. En su exterior destacan sus 4 torres octogonales y una gran cúpula central. No pudimos ver el interior por estar cerrado al público.
- Capilla del Cerrito y mirador del cerro de Tepeyac: la capilla se construyó en homenaje a la primera aparición de la Virgen de Guadalupe. Desde el cerro se tienen unas bonitas vistas del resto del conjunto.
- Antigua Parroquia de Indios: es el edificio más antiguo y debe su nombre a que era lugar de oración solo para los nativos católicos.
- Capilla del Pocito: precioso templo circular de estilo barroco decorado con azulejos de Talavera. Debe su nombre al pozo de aguas supuestamente milagrosas que había en el lugar.
Yacimiento arqueológico de Teotihuacán
A unos 40 kilómetros al noreste de Ciudad de México se encuentran los restos de lo que fue el centro urbano más importante entre los siglos III y VI, con gran desarrollo político, militar, económico y cultural y que llegó a tener más de 150000 habitantes, hoy en día es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde 1987. Los aztecas descubrieron la ciudad en ruinas en el siglo XIV y le dieron su nombre actual, que significa «el lugar en el que fueron creados los dioses”. Los puntos más destacados para visitar son:
- Pirámide del Sol con 63 metros de altura.
- Pirámide de la Luna con 40 metros de altura.
- Calzada de los Muertos con una longitud de 2 kilómetros.
- Palacio de Quetzalpapálot con diversos murales y el espectacular Patio de los Pilares.
- Templo de Quetzalcoatl (deidad de la Serpiente Emplumada) decorado con grandes cabezas de serpientes.
Además, hay dos museos especializados: el de la Cultura Teotihuacana y el Museo de Murales Teotihuacanos “Beatriz de la Fuente”.
El horario de la zona arqueológica es de lunes a domingo de 8:00 a 17:00 y la entrada cuesta 90 pesos mexicanos (unos 5 euros); el aparcamiento cuesta 50 pesos mexicanos (unos 3 euros). También se puede llegar en buses que salen desde la Terminal Central de Autobuses del Norte.
Todo esto fue lo que pudimos ver en Ciudad de México durante dos intensos días, además de ver el Monumento a la Independencia, un espectáculo de voladores en el Parque Tamayo, comer tacos y guajolota (torta de tamal), beber champurrado (maíz, cacao, canela y agua) y visitar la increíble pastelería Ideal, el paraíso de los golosos.
¡¡Hasta el próximo post!!