Amaneció en Akureyri e iniciamos el día con un desayuno delicioso, durante el que aprovechamos para conversar con el dueño del hotel en el que nos hospedamos; muy amablemente nos recomendó algunos lugares a visitar por la costa en vez de ir directamente a Glaumbær, que era el plan inicial.
El recorrido recomendado era visitar 4 pueblos en la costa Dalvik, Ólafsfjörður, Siglufjördur y Hofsós. Nos indicaron que nos arrepentiríamos de las vistas que íbamos a tener en el recorrido, esta fue la nueva ruta que agregamos para el día.
El rinoceronte de piedra Hvitserkur
Así que seguimos las recomendaciones y decidimos bordear la costa desde Akureyri y conocer esos lugares. Iniciamos el recorrido y nos encontramos con paisajes increíbles, incluso de repente nos encontramos con una pequeña cascada que caía directamente al mar.
cascadas de islandia
En el recorrido pasamos por un túnel muy particular, ya que era una sola vía y había que parar en espacios habilitados para dejar pasar a los coches que venían en sentido contrario. Lo cierto es que el túnel daba un poco de miedo, ya que parecía que no tenía fin y estaba muy oscuro. 

El primer punto en el recorrido fue Dalvik, un pequeño pueblo pesquero que nos llamó mucho la atención por la decoración con viejos botes que tenían algunos locales. El pueblo se veía muy tranquilo, el lugar perfecto para relajarse.

Seguimos el recorrido y pasamos por Ólafsfjörður y Siglufjördur, otros pueblos pesqueros desde donde salen ferrys para visitar las islas de Hrísey y Grímsey, además de tours para avistar ballenas.
El rinoceronte de piedra Hvitserkur
El siguiente pueblo que visitamos fue Hofsós, muy pequeño y con uno de los puertos más antiguos de Islandia, además de que es muy famoso por tener la piscina artificial más moderna de toda la isla y unas vistas impresionantes del fiordo.
No nos defraudó la recomendación que nos dieron en el hotel de Akureyri, el recorrido por la costa fue espectacular, vimos paisajes bellísimos y pueblos muy pintorescos. Desde Hofsós nos trasladamos a un lugar que si teníamos planificado visitar, Glaumbær.
Glaumbær es un museo Skagafjirdur que representa cómo eran las construcciones antiguas utilizando un material conocido como turba, que era muy fácil de conseguir y era muy aislante para las épocas de frío.
El rinoceronte de piedra Hvitserkur
El tipo de construcción consistía en unir raíces  de marismas o pantanos para formar terrones de diferentes formas que se colocaban alrededor de las casas. Esto da la impresión de que la casa está construida debajo de la tierra.
El rinoceronte de piedra Hvitserkur
Retomamos el camino para dirigirnos a la península Vatnsnes, a casi 2 horas desde Glaumbær.  Para llegar a esta península se tiene que dejar la Ring Road y entrar a la F 711 (carretera secundaria) que no está asfaltada, por lo que hay que conducir más lento. Hay que seguir hasta encontrar un pequeño local que es una cafetería (nunca imaginamos encontrar allí algo), y más adelante, bajar a un estacionamiento desde el que se camina unos 5 minutos para llegar a un mirador y poder ver Hvitserkur.
El rinoceronte de piedra Hvitserkur
Esta formación rocosa conocida como “El rinoceronte de Piedra” se formó por  la acción del viento y el agua sobre magma volcánico. Bajar hasta la playa y verlo de cerca está un poco complicado, nosotros nos conformamos con verlo desde allí, eso sí, el viento en ese punto es exagerado, ¡recomendamos un buen abrigo!
El rinoceronte de piedra Hvitserkur
Si quiere ver Glaumbaer y el Rinoceronte de Piedra mira este Vídeo

Muy cerca de allí se encuentra un lugar donde se puede avistar un grupo enorme de focas en la otra orilla de la entrada del mar. Aquí sí pudimos bajar hasta la playa y tomar algunas imágenes de las focas, incluso se pueden observar en el agua asomando la cabeza.

El rinoceronte de piedra Hvitserkur

En el camino de regreso paramos para ver los famosos caballos islandeses. La península Vatnsneses conocida por tener muchos criaderos de estos caballos, que se parecen a un poni y que tienen una apariencia muy estilizada.

El rinoceronte de piedra Hvitserkur

Ahora tocaba llegar hasta el hotel, que se encontraba muy cerca y descansar. Aunque en este día inicialmente no había muchos lugares para visitar, siempre se pueden encontrar muchas cosas para ver en el camino. 

Al día siguiente nos tocaba visitar la península Snaefellsnes, ¡no os perdáis todo lo que vimos en esta parte de Islandia que inspiró a Julio Verne!

Iradier Rovira Peña