Ciudad Rodrigo es una de las localidades abaluartadas que se extienden por la frontera portuguesa. Situada al oeste de la provincia de Salamanca, estuvo habitada desde tiempos prehistóricos debido a su ubicación estratégica sobre una colina sobre el río Águeda. Fue lugar donde habitaron también los vetones, que lo llamaron Miróbriga Vettonum, y los romanos, que lo llamaron Miróbriga Augusta. En el siglo XII, el conde Rodrigo González Girón lo reconquista a los musulmanes, dándole nombre e iniciando la construcción de la catedral y la muralla. En los siglos XV y XVI, la ciudad alcanzó gran esplendor, siendo de esta época la mayor parte de templos y palacios.
La ciudad fue declarada Conjunto Histórico Artístico en 1944, y forma parte de la red de Pueblos más bonitos de España. Además, se encuentra a menos de 50 kilómetros de Almeida, otra ciudad abaluartada pero en el lado portugués.
Qué ver en Ciudad Rodrigo
Castillo o alcázar
En la parte más alta de la ciudad está el castillo o alcázar de Enrique II de Trastámara, construido en el siglo XIV. Destaca la Torre del Homenaje, con ventanas ojivales y tres plantas. Actualmente ha sido acondicionado como Parador Nacional de Turismo.
En la plaza del Castillo hay un verraco, que no siempre estuvo en ese lugar. Antiguamente estaba en el puente y era el símbolo del portazgo, una tasa para los que iban y venían de Portugal; en 1835, tras una orden por la que tenían que retirarse todos los verracos de la provincia, la población lo lanzó al río, de donde se rescató un siglo más tarde para ser colocado en su ubicación actual.
Murallas
Ciudad Rodrigo tiene dos líneas de murallas: la primera, del siglo XII, que rodea a la ciudad y tiene varias torres de vigilancia, y la segunda, del siglo XV, que rodea a la primera y es la que tiene baluartes y revellines; entre ambas había un foso. Las murallas que se conservan hoy en día datan de una reforma del siglo XVIII, y conservan siete puertas de las ocho iniciales; las más importantes son la de Santiago y la del Sol.
La primera muralla tiene un perímetro de 2 kilómetros y se puede recorrer de forma gratuita; en ella se pueden observar cañones, como en el tramo de la catedral. Este lugar es conocido como la Brecha, por haber entrado por ese lugar las tropas enemigas durante la Guerra de Independencia.
Plaza Mayor
Se trata del centro de la vida social de la ciudad y se transforma en coso taurino durante la celebración de eventos festivos. En ella se encuentran numerosos restaurantes y dos edificios con bonitas fachadas.
Uno de ellos es el Ayuntamiento, cuya fachada data de dos épocas diferentes: la parte frontal de estilo renacentista de mediados del siglo XVI, con arcos carpaneles sobre columnas con capiteles platerescos, y la lateral de principios del siglo XX. La parte frontal está flanqueada por dos torres cilíndricas, en una de las cuales hay tres escudos: el Imperial de España, el de la ciudad con las tres columnas y otro perteneciente al gobernador de la ciudad en la época; también hay una espadaña con campanas y dos cañones, copias de los utilizados en la Guerra de Independencia.
El otro edificio es la Casa de los Cueto o del Primer Márques de Cerralbo, construido en la primera mitad del siglo XVI. Los elementos que destacan en la fachada son el friso con adornos platerescos de medallones y grutescos, así como los escudos inclinados o a la valona y las columnillas torsas de las esquinas.
Catedral de Santa María
Su construcción comenzó en el siglo XII en un estilo tardorrománico, pero las obras se prolongaron casi 6 siglos, por lo que tiene influencias de otros estilos, como el gótico. Tiene tres puertas de acceso al interior: el Pórtico del Perdón, la Puerta de las Cadenas y la del Enlosado o de Amayuelas.
El Pórtico del Perdón es la más importante por su extensa iconografía con representaciones alusivas a Jesús, los apóstoles y la Virgen, inspirada en el Pórtico de la Gloria de la catedral de Santiago de Compostela; esta puerta no es visible desde el exterior ya que en el siglo XVIII se construyó una fachada con la Torre de las Campanas. La puerta de las Cadenas tiene en la parte superior un magnífico friso gótico con doce figuras del Antiguo Testamento (el último de la derecha es Jeremías pensativo y no el hombre que habla por el móvil como algunos pueden pensar, tipo astronauta en la Catedral Nuevade Salamanca que en realidad es un añadido del siglo XX). La Puerta del Enlosado o de Amayuelas es la más sencilla.
En el interior de la catedral destacan las capillas, el coro plateresco del siglo XV, el órgano y el claustro. Nos gustó mucho este último, con galerías de arcos apuntados apoyados en columnas con capiteles decorados con motivos vegetales; tiene una preciosa portada plateresca de acceso al patio y a lo largo de las galerías hay varias estatuas de Vírgenes con Niño.
También hay un museo diocesano y catedralicio.
La visita a la catedral es de pago, excepto los domingos por la tarde, que es gratuita; el único inconveniente es que en la visita gratuita no se permite ver el Pórtico del Perdón.
Iglesia o Capilla de Cerralbo
Al lado de la catedral se encuentra esta iglesia de estilo herreriano, construida para ser panteón de la familia Pacheco; en ella está enterrado don Enrique de Aguilera y Gamboa, marqués de Cerralbo. Fue construida en el siglo XVI por orden del cardenal Francisco Pacheco, hermano del marqués.
Como curiosidad, esta iglesia fue construida con el propósito de hacer sombra a la catedral en cuanto a grandiosidad; literalmente ocurre así, ya que proyecta su sombra sobre la catedral cuando sale el sol al amanecer.
Otros edificios religiosos
- Iglesia parroquial de San Pedro y San Isidoro: construida en el siglo XVI sobre los restos de un anterior templo del siglo XII de estilo románico mudéjar, del que se conserva el ábside y parte del muro norte.
- Iglesia de San Agustín: construida a finales del siglo XVI, perteneció a un convento dominico. Tiene una portada formada por un arco de medio punto con la imagen de San Agustín.
- Capilla de la Venerable Orden Tercera: construida a finales del siglo XVIII en el solar que ocupó la iglesia del Santo Sepulcro.
- Ruinas del Convento de San Francisco: fuera del recinto amurallado.
Plaza del Buen Alcalde
Al lado de la Iglesia de Cerralbo encontramos esta bonita plaza, rodeada de soportales y con una fuente de estilo romántico en el centro, que anteriormente estuvo en la Plaza Mayor. En ella se celebra, entre otros eventos, un mercado franco semanal de frutas y verduras desde la época de los Reyes Católicos, que fueron quienes concedieron a la ciudad tal privilegio como compensación por los continuos conflictos con Portugal.
Palacio de los Águila
Este palacio, que es más grande e importante de la localidad, también se llama Palacio del Príncipe Melito o Casa del Marqués de Altares, y fue construido en el siglo XVI y ampliado en el XVII. Es de estilo renacentista con influencia gótica y tiene una portada enmarcada en grandes dovelas, con escudos de armas y una ventana de estilo gótico francés con adornos de escamas, así como las figuras de un león y un águila.
En su interior hay un precioso patio plateresco, de planta cuadrada con dos pisos de galerías con arcos en tres de sus lados; destaca la decoración de brutescos y motivos vegetales.
También hay un segundo patio pero sin decoración, ya que por él entraban los criados con carruajes. Completa el conjunto una capilla.
Actualmente el edificio se utiliza para exposiciones y alberga la oficina de turismo.
Otros palacios y casas señoriales
Son muchos los que salpican el casco histórico, la mayoría construidos durante los siglos XV y XVI. Algunos de ellos son:
- Casa de los Vázquez: construida en el siglo XVI, destaca su portada gótica con arco de medio punto que se convierte en ojival y un escudo a la valona; en el interior hay un artesonado mudéjar y azulejado andaluz. Es edificio de Correos desde 1944.
- Casa de la Cadena: construida en el siglo XVI, su nombre se debe a la cadena labrada en la piedra que la rodea, cuyo significado es que ostentaba el derecho de asilo; tiene una ventana en ángulo con función de vigilancia y una torrecilla que esconde una escalera de caracol.
- Hospital de la Pasión: edificado en el siglo XVI en el solar de la antigua sinagoga judía como lugar en el que cuidar de enfermos pobres. Tiene una portada neoclásica del siglo XVIII construida tras un incendio en el edificio. Actualmente es residencia de ancianos.
- Casa de la Marquesa de Cartago: es la única moderna, ya que fue construida a finales del siglo XIX. De estilo neogótico, destacan la portada con escudos de armas, el balcón esquinado y la decoración de las ventanas.
Otros edificios de interés son Casa de los Miranda, Casa de los Núñez de Chaves, Casa de los Gómez de Silva, Palacio Episcopal, Palacio de los Ávila y Tiedra…
Tres columnas
En las afueras de la ciudad se encuentran las llamadas Tres Columnas, que datan de la época romana y desde la Edad Media fueron adoptadas como símbolo de la ciudad e incluidas en el escudo de la misma.
Puente Mayor
Este puente sobre el río Águeda tiene origen romano, pero el actual fue construido posteriormente. De sus siete arcos, los más cercanos al recinto amurallado datan del siglo XVI y los más alejados son de época medieval.
Qué comer en Ciudad Rodrigo
La gastronomía mirobrigense se basa en productos autóctonos, como las legumbres y las carnes. Pero si hay uno que destaca por encima de todos es el farinato, un embutido elaborado con manteca de cerdo, pan, pimentón, anises y aguardiente; se suele comer con huevos fritos… ¡delicioso!
Otras recetas típicas de la zona, y de la provincia en general, son el hornazo, las patatas meneás, la chanfaina, los guisos de cuchara o los platos de caza. En cuanto a los dulces, tenemos las perrunillas, los repelaos, el bollo maimón o las obleas.
En la zona de la Plaza Mayor hay numerosos restaurantes que ofrecen menús con los platos más típicos de la ciudad, y también en la zona de la catedral.
Alrededores de Ciudad Rodrigo
Muchos son los lugares interesantes cerca de Ciudad Rodrigo, tanto urbanos como espacios naturales. Algunos de ellos son:
- Zona arqueológica Siega Verde, declarada Patrimonio Mundial de la Humanidad por la UNESCO en 2010.
- Parque Natural Arribes del Duero, donde se puede realizar un crucero fluvial.
- Sierra de Francia, con pueblos tan bonitos como La Alberca, Miranda del Castañar, San Martín del Castañar o Sotoserrano, entre otros.
- Ruta de castros y verracos.
- Ruta de fortificaciones. Nosotros visitamos Almeida, bonita villa portuguesa que forma parte de las Aldeas Históricas de Portugal.
¡¡Hasta el próximo post!!