Calatañazor es uno de esos preciosos pueblitos sorianos que bien merecería estar entre los más bonitos de España. Sus calles estrechas y adoquinadas y sus casitas con entramado de madera y soportales, típicos de la arquitectura popular de la Edad Media, invitan a recrearse admirándolos sin prisa. Además, ha servido de escenario para algunas películas, como Campanadas de medianoche, dirigida por Orson Welles, o Fuenteovejuna.
Qué ver en Calatañazor en un día

Pero …. ¿Qué ver en Calatañazor en un día?

Comenzamos por la ermita de Nuestra Señora de la Soledad, de estilo románico, a la entrada del pueblo, donde hay un aparcamiento. ¡Hay que observar las máscaras de la parte superior del ábside! Desde su ubicación se podían observar los restos de la muralla y el castillo que nos esperaban más arriba.
Qué ver en Calatañazor en un día
Si subimos por la calle Real, la principal del pueblo, encontramos magníficos ejemplos de las casas castellanas de dos plantas, la inferior de piedra y la superior, de adobe, levantada sobre madera de sabina con escudos, ventanas y balcones.
Qué ver en Calatañazor en un día
En esta calle nos encontramos con la iglesia de Nuestra Señora del Castillo, de estilo románico del siglo XIII aunque restaurada en estilo gótico en el XVI; destaca su óculo para iluminar el interior. No pudimos verla por dentro al encontrarla cerrada, pero  sabemos que tiene una pila bautismal medieval, un órgano portátil y un Cristo gótico conocido como de El Amparo. También tiene un museo.
Más adelante vimos el busto de Almanzor. Según el dicho, Muhammad Ibn Abï Amir, o lo que es lo mismo, Almanzor, perdió el tambor en Calatañazor; la leyenda cuenta que este militar musulmán, tras muchas victorias fue derrotado en este pueblo, perdiendo su alegría (el tambor) y dejándose morir. También se puede leer un poema de Gerardo Diego.
Después llegamos a la plaza Mayor, en la que se levanta un rollo o picota, que solía tener una función de castigo para delincuentes. También hay una curiosa piedra, llamada del Abanico, en la que se observa la huella fósil de una hoja de palmera, pues la roca sobre la que se asienta el pueblo es un depósito de sedimentos de entre 10 y 25 millones de años de antigüedad.
Y así alcanzamos la parte más alta del pueblo, dominada por el castillo, del siglo XII. Se conserva bastante bien la torre del homenaje, de planta cuadrada, a la que se puede subir y desde la que se tienen unas bonitas vistas del pueblo, así como de los restos de un torreón circular perteneciente a la muralla y de la llanura llamada Valle de la Sangre.
Qué ver en Calatañazor en un día
La muralla se conserva en bastantes tramos; fue construida en el siglo XII y tenía varias torres circulares con función de vigilancia.
Qué ver en Calatañazor en un día
Mientras iniciamos el descenso por la calle Tirador, paralela a la calle Real desde la plaza Mayor, vamos viendo más casitas y hasta un bonito palomar.
Qué ver en Calatañazor en un día
Nos llamaron la atención las bonitas chimeneas cónicas repartidas por los tejados. Estas chimeneas son muy importantes en las viviendas, ya que alrededor de la lumbre de las cocinas era donde se hacía la vida de la casa.
Qué ver en Calatañazor en un día
Llegamos a nuestro punto de partida, la entrada del pueblo. Muy cerca de allí, junto a otro aparcamiento, están las ruinas de la ermita de San Juan Bautista, de la que apenas queda en pie el bonito arco románico de medio punto de la portada y los muros.
Qué ver en Calatañazor en un día
Desde allí hay que ir caminando a los restos de una necrópolis medieval, de los siglos XI y XII, que se encuentra a los pies del castillo. Se trata de tres tumbas excavadas en la cima de un bloque calizo; una de las tumbas es de forma oval y las otras antropomorfas en las que se distinguen muy bien el contorno de la cabeza y los hombros.
Qué ver en Calatañazor en un día
Desde aquí las vistas del castillo son inigualables.
Qué ver en Calatañazor en un día

Qué ver en los alrededores de Calatañazor 

En los alrededores de Calatañazor podemos encontrar varios puntos imprescindibles para conocer:
  • Sabinar de Calatañazor, a 3 kilómetros al noroeste, por la carretera que parte de la ermita de San Juan Bautista. Es uno de los más importantes de la península y constituye una reserva natural cuyo origen proviene del Terciario. Tiene algunos ejemplares que superan los 15 metros de altura. Y los 5 de diámetro.
  • La Fuentona, a 2 kilómetros más adelante del sabinar, siguiendo la misma carretera. Se trata de una laguna kárstica, nacimiento del río Albión. Hay un aparcamiento en el centro de interpretación que cuesta 4 euros, pero se puede dejar el coche en Muriel de la Fuente (al lado del cartel de Espacios Naturales) e ir caminando en un agradable paseo de unos 20 minutos en total. El recorrido es muy bonito, con aguas cristalinas y puentes de madera; También hay indicaciones para ir a una cascada y una atalaya.

Qué ver en Calatañazor en un día

La laguna en sí no es muy grande, pero proviene de aguas subterráneas que recorren galerías y pozos. Además, cuenta con plantas acuáticas, anfibias y de pedregal, así como algunos peces, insectos, anfibios y aves. 
Ya más alejados, podemos continuar la excursión hasta el cañón del río Lobos, la laguna Negra o la zona de Duruelo de la Sierra, con la espectacular zona rocosa de Castroviejo, la cueva Serena o el nacimiento del río Duero.
Nos gustaron muchísimo tanto Calatañazor como sus alrededores, y esperamos poder volver pronto para ver algunos sitios que fuimos descubriendo sobre la marcha y que nos quedaron pendientes por falta de tiempo.
¡¡Hasta el próximo post!!