Torrelaguna es una bonita localidad situada en el valle medio del Jarama de la Sierra Norte de Madrid, al noreste de la Comunidad y a tan solo 50 kilómetros de la capital. Su nombre proviene de la unión de las palabras «torre» y «laguna», haciendo referencia a la torre defensiva y a las lagunas que existían en la zona.
A lo largo de la historia, ha sido testigo de diversas culturas que dejaron su huella en esta tierra. Durante la época romana, formó parte de la calzada que unía Segovia con Titulcia, pero fue en la Edad Media cuando adquirió mayor relevancia: en el siglo XIV se concedió a Torrelaguna el título de Villa Real, independizándose de la vecina Uceda y convirtiéndose en una de las más importantes del reino de Castilla; además, se convirtió en un enclave estratégico por su ubicación entre los reinos de Castilla y Aragón. En el siglo XV, Juan II de Castilla cedió la villa a su valido, Álvaro de Luna, que realizó importantes obras. En los siglos posteriores, Torrelaguna experimentó un declive debido a diversas guerras y conflictos, como la Guerra de la Independencia en 1808. A pesar de ello, ha mantenido su patrimonio arquitectónico, por lo que fue declarada Conjunto Histórico-Artístico en 1974. Además, es una de las Once Villas de Madrid.
Hoy en día, se puede disfrutar de un agradable paseo por las estrechas calles empedradas de Torrelaguna y descubrir sus numerosos monumentos, además de explorar su entorno natural privilegiado.
Qué ver en Torrelaguna
Palacio Salinas
Fue el primer monumento que encontramos tras haber dejado el coche en el aparcamiento municipal. Se construyó en el siglo XVI y solo se conserva su fachada renacentista, pues el resto fue destruido durante la Guerra Civil. Tras ser reconstruido, actualmente es la casa-cuartel de la Guardia Civil. Junto al edificio hay un parque con esculturas en homenaje a personajes relevantes de Torrelaguna, como el Cardenal Cisneros y Santa María de la Cabeza, que nacieron aquí.
Arco de San Bartolomé
También llamado Arco del Coso o Puerta de Montalbán, está situado junto al Palacio Salinas. Se construyó a principios del siglo XX para conectar el barrio extramuros y está realizado en ladrillo y piedra, de forma similar a otras puertas originales de la muralla.
Plaza Mayor
Es una típica plaza castellana, de planta irregular, lugar de reunión para locales y visitantes. Tiene importantes edificios como el Ayuntamiento, la Iglesia de Santa María Magdalena, la Iglesia de Concepcionistas Franciscanas y la Cruz de Cisneros.
Ayuntamiento
Construido en el siglo XVI, fue el antiguo pósito o almacén de grano, aunque después tuvo otros usos como cárcel, biblioteca o estación de telégrafos. El edificio es renacentista aunque el arco ojival de la puerta es gótico. Destacan su bonita fachada de dos plantas porticadas y el gran escudo del Cardenal Cisneros con inscripción fundacional.
Iglesia de Santa María Magdalena
Construida entre los siglos XV y XVII, es el principal monumento de Torrelaguna y un destacado ejemplo de arquitectura gótica de la Comunidad de Madrid. En el exterior figuran los escudos de los cardenales Martínez de Contreras, Mendoza, Cisneros y Fonseca, quienes financiaron la construcción. La portada principal muestra la imposición de la casulla a San Ildefonso y la fachada sur, la Resurrección de Cristo.
En el interior destaca el Retablo Mayor plateresco, con la imagen de Santa María Magdalena, flanqueada por San Isidro Labrador y Santa María de la Cabeza. También alberga los restos del poeta Juan de Mena, natural de la villa, y la lápida de Alfonso Jiménez, padre del Cardenal Cisneros.
Iglesia de las Hermanas Concepcionistas Franciscanas Descalzas
Fue fundada en el siglo XVI por la familia Bernaldo de Quirós. Solo se conserva la portada plateresca y el sepulcro de los fundadores, ya que durante la Guerra Civil sufrió grandes destrozos y fue reconstruida a mediados del siglo XX. En su interior hay un retablo del siglo XVII con una talla de la Inmaculada Concepción.
Cruz de Cisneros
Fue construida en 1802 en el lugar donde estuvo la casa natal del Cardenal. Gonzalo Jiménez de Cisneros nació en 1436 y llegó a ser confesor real, arzobispo de Toledo, Inquisidor General de Castilla y regente de España tras la muerte del rey Fernando el Católico. Contribuyó a la construcción de la iglesia parroquial, el convento franciscano de la Madre de Dios y el pósito municipal, la fundación de un hospital y la conducción del agua.
Plaza de la Montera
Esta pequeña plaza tiene dos bonitas casas solariegas de los siglos XVII y XVIII, realizadas con ladrillo y piedra, que al parecer aún conservan cuevas-bodega pero que no se pueden visitar. Aunque han sido reformadas, mantienen elementos originales como los escudos nobiliarios. Muy cerca aún hay restos de la Torre de la Montera, antigua torre de vigilancia de la muralla.
Muralla
La villa tuvo una muralla construida en diferentes etapas aprovechando restos anteriores; se terminó de construir a principios del siglo XV. Se fue deteriorando por los desperfectos sufridos en la Guerra de la Independencia y el crecimiento de la población, estando los restos más visibles en la calle del Marqués de Torrelaguna.
Puerta del Cristo de Burgos
Es una de las puertas que aún se mantiene de todas las que había en el recinto amurallado. Tenía adosada una torre de vigilancia y en su cara exterior hay una hornacina con una cruz. Era la salida hacia Uceda.
Puerta de Santa Fe o del Visitador
En ella estaba la residencia de visitadores eclesiásticos, recaudadores e inspectores de rentas del Arzobispado de Toledo. La cruz florada es referencia de la festividad de las Cruces de Mayo.
Alhóndiga o Alfolí de la Sal
Está situado en la calle de la Estrella, antigua vía pecuaria intramuros. Fue construido entre los siglos XIV y XV como alhóndiga o mercado de abastos, siendo utilizado después como alfolí o almacén de sal para el ganado. El edificio actual ha sido rehabilitado y alberga un restaurante.
Palacio del Marqués del Pozo o de Casa Pimentel
Situado frente a la Alhóndiga, encontramos este palacio del siglo XVIII y que hoy está en estado de ruina.
Casa de la Cultura
Está situada en el antiguo Hospital de la Santísima Trinidad, hospital de beneficencia fundado en el siglo XV por la familia Bernardo de Quirós. Se cree que anteriormente fue mezquita en época musulmana y sinagoga judía tras la reconquista cristiana. Actualmente es el centro cultural de Torrelaguna.
Puente medieval y Fuente Gorda
Está situado en la calle del Marqués de Torrelaguna, sobre el Arroyo Matachivos. Muy cerca está la Fuente Gorda o de la Hontanilla, abrevadero del ganado trashumante en el Barrio del Arrabal.
Palacio de Arteaga o del Infantado
Edificio clasicista construido entre los siglos XVII y XVIII, que en su momento acogió a personajes ilustres como la reina Isabel II, el general Espartero y los reyes Alfonso XII y Alfonso XIII. El Canal de Isabel II lo adquirió a mediados del siglo XIX; así, Torrelaguna fue la primera sede de este organismo.
Casa de los Vargas
Esta casa señorial, también conocida como casa de San Isidro, perteneció a la familia Vargas, cuyas tierras fueron trabajadas por San Isidro. De la casa original no queda nada, siendo una portada renacentista lo que se ve en la actualidad.
Monasterio Franciscano de la Madre de Dios
Construido en el siglo XVI como lugar de estudio para religiosos y seglares, también fue el lugar escogido por las familias importantes de la Villa para su enterramiento. Fue prácticamente destruido durante la Guerra de la Independencia, quedando en pie la espadaña, que fue lo único que pudimos ver tras un muro pues actualmente se encuentra en propiedad privada.
Convento de las Carmelitas de la Caridad
Construido a finales del siglo XIX e inaugurado en 1905, inicialmente era una fundación benéfica para la enseñanza de los niños pobres. Destaca su fachada con espadaña y rosetón.
Centro Montalbán
Bonito edificio de estilo ecléctico construido en 1915 para ser escuela de educación primaria, que estuvo en funcionamiento hasta la construcción de los nuevos colegios; desde entonces, tiene múltiples usos.
Ermita de Nuestra Señora de la Soledad o de la Veracruz
A finales del siglo XV fue el humilladero de la Veracruz, lugar de penitencia pública y límite jurisdiccional. En el siglo XVII se colocó la imagen de la Virgen de la Soledad.
Otras ermitas son la de San Sebastián, la de Santa María de la Cabeza y la de San Miguel Arcángel y de Nuestra Señora de la Buena Dicha.
Qué hacer en Torrelaguna
Se pueden realizar varias rutas de senderismo:
- Ruta de la Romería: fácil, de unos 9,5 kilómetros y duración unas 3 horas aproximadamente.
- Ruta de la Pañera: fácil, de unos 10 kilómetros y duración unas 3 horas aproximadamente.
- Ruta a las Loberas de Valgallego: difícil, de unos 7 kilómetros y duración unas 3 horas y media aproximadamente.
Gastronomía
La gastronomía de Torrelaguna es para disfrutarla. Se trata de una cocina castellana tradicional con platos de cuchara, carne y productos naturales como la miel, el queso fresco o el yogur. Existen varios restaurantes donde disfrutar de un menú del día, aunque en esta ocasión, nosotros preferimos tomar unas raciones: sopa castellana, croquetas de jamón y boletus, huevos rotos con patatas y picadillo de matanza.
Cómo llegar a Torrelaguna
La forma más fácil de llegar desde Madrid es en coche: por la autovía A-1, salida del kilómetro 50 hasta llegar por la N-320. Se puede dejar el coche en el aparcamiento municipal.
También se puede llegar en transporte público hasta Patones de Abajo, en el autobús 197 desde Plaza de Castilla.
Alrededores de Torrelaguna
Varios son los atractivos, tanto urbanos como naturales, que hay en las proximidades de Torrelaguna:
- Atalaya de Arrebatacapas: torre árabe del siglo X que formaba parte de un conjunto de torreones defensivos levantados por la Sierra de Madrid.
- Embalse de El Atazar, con rutas de senderismo y actividades acuáticas.
- Cárcavas de Pontón de la Oliva, con su singular paraje.
- Yacimiento romano Pontón de la Oliva
- Los preciosos pueblos de Patones de Arriba, La Cabrera, Buitrago del Lozoya, El Berrueco Talamanca de Jarama…
¡¡Hasta el próximo post!!